Las otras muertes
Aún conservo algún juguete de la infancia. Para uno, conservar objetos personales antiguos es como para la sociedad conservar bienes que atestiguan su historia. Recuerdo perfectamente cómo era jugar con ellos, las emociones que surgían, sobre todo al compartirlos con amigos. Sin embargo, como sucede con todo, hubo un día que fue el último, una ocasión en la que jugué por última vez sin ser consciente de ello y que hoy sería incapaz de recordar. Ese es el día en el que pasamos de ser niños grandes a adolescentes jóvenes. Ese es el día en que morimos como niños.